Bimba fue rescatada junto a su hermano de una muerte segura cuando fueron abandonados siendo sólo unos bebés, como si fueran basura. Ambos fueron afortunados y rápidamente encontraron buenas adopciones. Sin embargo, Bimba fue devuelta unos meses más tarde, debido a una enfermedad terminal de su adoptante. Volvió a ser adoptada y, de nuevo, la mala suerte se cebó con ella. La pareja que la adoptó se separó y volvió a ser abandonada. Ahora espera su tercera y última oportunidad. Es una perra diez. No puede ser más alegre y cariñosa. Es muy activa y le encanta jugar con otros perros y con personas. Cuando sale a pasear, causa sensación debido a su carácter tan juguetón y a ese pelaje negro y brillante que la caracterizan. Ella pesa 27 kg, llenos de amor y pasión por vivir. Como buena cruce de pastor belga es inteligentísima y aprende rápido. Creemos que su familia ideal tiene que ser alguien deportista que tenga ganas de disfrutar de una perra a la que también le encanta jugar y quemar energía. Si quieres verla en acción, puedes pinchar en este vídeo https://youtu.be/Rxksckhg76w