Es un perrete pequeño que apenas pesa 10 kilos y de la noche a la mañana ha pasado de vivir en un hogar a estar en un refugio rodeado de un montón de perros… Lo está pasando mal. En el tiempo que lleva con nosotros ha mejorado del miedo con el que llegó porque ve que solo queremos cuidarle y quererle pero necesita un hogar y a alguien con un poco de paciencia para seguir evolucionando, que le vaya dando más seguridad poco a poco y le haga ver que no pasa nada, que solo va a vivir cosas buenas. Este perrito de verdad necesita ser adoptado cuanto antes, ¿Quieres darle una familia definitiva?