¿Cómo es el temperamento del bichón maltés?

El gesto de cachorro en su cara y su expresión de alerta permanente. Son dos de las grandes características que no cambian en él, tenga la edad que tenga. El temperamento del bichón maltés es cariñoso, afable y tranquilo, aunque también puede llegar a ser un poco gruñón. Acompáñanos, hoy te presentamos a este simpático peludo…

Ideal para familias

Su increíble pelaje blanco y sedoso, su cara de cachorro y el pequeño tamaño son algunas de las características que hacen al bichón maltés un perro encantador. Sin embargo, más allá de su aspecto, su carácter es lo que realmente le convierte en un amigo único:

  • Cariñoso y adaptable. Es la raza perfecta para convivir con otras mascotas, es muy cariñoso y crea unos grandes lazos afectivos con sus amos. En realidad, es ideal para familias porque, además de ocupar poco espacio y tener un temperamento afectuoso, es muy fácil de educar porque siempre está dispuesto a aprender.
  • Compañía y mimos. Lo más importante del mundo para él es estar con su familia. Siempre mimoso, por encima de cualquier cosa, adora pasar tiempo con los suyos y disfruta del placer de las caricias, estar en brazos y las palabras dulces… La fidelidad y lealtad con sus dueños, el temperamento del bichón maltés equilibrado y el carácter tranquilo lo convierten en un buen compañero para personas mayores con ganas de regalarles tiempo de mimos y reposo.
  • Mejor en interior. Prefiere vivir en un piso que en un amplio jardín, no solo por su gran capacidad para adaptarse, sino también porque prefiere, antes que nada, la compañía tranquila de su familia.
  • Guardián y protector. Además, el bichón es protector con su territorio por lo que, aunque no puede ejercer como perro guardián por su tamaño, sí ayuda a alertar para proteger a sus seres queridos. Aunque no suele ladrar, no dudará en hacerlo cuando algo le llame la atención o quiera avisar de algo inusual.

¿Cómo es el temperamento del bichón maltés

Simpático, juguetón y valiente. Su expresión alegre y su apariencia de eterno cachorro no es más que un reflejo de su carácter juguetón y simpático. Aunque no suele ser muy inquieto y puede pasar mucho tiempo acostado (durmiendo o no), es capaz de pasar la tarde entera compartiendo juegos con niños o al aire libre.

De hecho, el juego es una parte fundamental en su día a día, por lo que es recomendable dedicarle su tiempo de juego para que disfrute de forma activa en familia. No le ocurre lo mismo con los paseos, ya que necesita mucho menos ejercicio diario que otras razas. Por eso, no precisa dar largos paseos durante horas.

Socializar, la clave de su carácter

Tiene una gran capacidad para adaptarse al entorno y a las circunstancias, es inteligente y siempre está dispuesto a aprender habilidades y obedecer órdenes. Aunque el bichón maltés no necesita un adiestramiento riguroso conviene educarlo desde cachorro para que no desarrolle comportamientos indeseados cuando sea un perro adulto.

Por eso es importante dedicar tiempo a que socialice con perros de diferentes tamaños y razas. Aunque es tranquilo, también es valiente y osado y no le preocupa meterse en problemas, aunque pueda llevarse más de un susto. De hecho, puede tener dificultades a la hora de relacionarse con otros canes por su carácter territorial, por eso resulta fundamental que, desde que es un cachorro, pase tiempo con otros perros.

Si estás buscando un perro que sienta adoración por ti y los tuyos, alegre, simpático y que siempre esté de buen humor y tienes tiempo y amor para regalar, deja de buscar. Ya has encontrado a tu amigo peludo perfecto: el bichón maltés.


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