Seguro que has oído hablar sobre la coprofagia, un problema que padecen algunas de nuestras mascotas y es muy poco agradable para los dueños.
Queremos que sepas que, a veces los animales desarrollan comportamientos anómalos y comienzan a consumir sustancias que no son alimentos. Este desajuste en el argot veterinario es lo que llamamos “pica”. En concreto, la costumbre de ingerir heces, propias o ajenas, se conoce por el término de “coprofagia”.
¿Por qué se produce?
Lo único que sabemos con certeza es que es un hábito que puede originarse por un problema de conducta o por una causa médica/de salud.
En cuanto a las causas relacionadas con el comportamiento, se barajan varias opciones:
Imitación de la actitud materna: como bien sabes, si alguna vez has tenido camadas, las mamás intentan tener a sus pequeños lo más limpios y aseados posible, por este motivo, ingieren los excrementos de los cachorros rápidamente. Esta actitud ancestral, la heredan de los lobos, que para mantener a los depredadores alejados y también para evitar el desarrollo de parásitos, ingerian rápidamente los desechos que se originaban.
Evitar la reacción del dueño: ocurre cuando los cachorros están aún aprendiendo a hacer sus necesidades en el momento y lugar adecuado. Si se les “escapa”, intentan hacer desaparecer el rastro de los excrementos y se los comen para evitar que su dueño les regañe.
Ansiedad por separación, estrés: como medida de reclamo, para que le hagas más caso, también en perritos que pasan muchas horas solos.
Atracción: hay algunas heces que les llaman la atención por el olor y les parecen muy apetecibles, mayoritariamente suelen ser las de los animales herbívoros o las de aquellos que estén muy bien alimentados, en cuyas deposiciones se excretan muchas proteínas, que resultan muy sabrosas para los perros.
Comunicación olfativa: para nuestros canes el olfato es un sentido esencial, ya que ellos huelen los excrementos y a partir de ahí extraen mucha información. Es más, les llama la atención comer las heces para conseguir oler aún más al otro perro.
Respecto a las causas relacionadas con la salud, hay varias:
Problemas hormonales, como por ejemplo el Síndrome de Cushing o el hipertiroidismo, hacen que tu perro tenga más hambre, por este motivo, comerá cualquier cosa.
Falta de algún nutriente, como son las vitaminas o minerales. Buscará suplementar ese déficit y comerá excrementos.
Parásitos internos, ocasionan una mala absorción, falta de nutrientes y vitaminas, por lo tanto, su instinto será el de ingerir algo que le ayude a sustituirlos.
Diabetes, tendrá más ansiedad por consumir alimentos.
Ciertos tratamientos, que aumentan la necesidad de ingestión, como pueden ser los corticoides.
¿La coprofagia es mala?
Realmente es una costumbre que puede resultar perjudicial para tu mascota. Piensa que las heces pueden estar parasitadas, contener bacterias y hongos que pueden jugar una mala pasada. Asimismo, podrían originar infecciones intestinales con diarreas además, originarle un problema por parásitos internos.
Tratamiento de la coprofagia
En primer lugar, es muy importante que acudas lo antes posible a tu Veterinario/a de confianza para que pueda explorar a tu mejor amigo. Debe hacer todas las pruebas necesarias para descartar un problema de salud y de este modo, poner el tratamiento adecuado para corregirlo y así ayudarle.
Una vez tengas todos los resultados, si se confirma tu peludo está sano como un roble, hay que redirigir ese comportamiento que presenta y para ello, tendrás que seguir estos puntos principales:
Procura retirar lo antes posible los excrementos, si se le escapan en casa o en el jardín. De igual forma, en la calle, vigila que no pueda coger nada del suelo e incluso sácalo con bozal si es necesario.
Intenta tenerlo entretenido en casa, para estimular su mente con juguetes y que no caiga en el aburrimiento, pues ya sabes que este puede ser un motivo que origine este desagradable problema.
Si tu perro sufre de autocoprofagia, es interesante que una vez hace sus necesidades, lo acostumbres a recibir un premio por tu parte, de este modo conseguirás su atención y que se olvide en ese momento de hacer lo que no debe. ¡Nos encanta el refuerzo positivo!
Un truco que resulta ser bastante efectivo es el de añadir a su alimento algunas sustancias que produzcan un olor en las heces que sea desagradable para el perro ( aceite vegetal, piña, algún suplemento alimentario…)
Por último, pero no menos importante, recuerda alimentar a tu compañero con un pienso completo adecuado, que tenga todos los ingredientes necesarios para el correcto desarrollo corporal. Resulta muy interesante que dividas su comida en tres tomas al día.
En nuestra tienda online Tiendanimal hay una gran variedad de productos a tu disposición para velar por la salud de tu mejor amigo para mantenerlo sano y con energía durante toda su vida.
Y si quieres aprender más sobre mascotas, no olvides leer nuestro blog, por ejemplo, ¿cómo saber si tu perro tiene parásitos intestinales?, ¡aquí te contamos!
Licenciada en Veterinaria por la Facultad de Córdoba en 2014.
Desde siempre me he involucrado en todo tipo de actividades con animales y mis mascotas son mi pasión.
Muy concienciada con el medioambiente y la naturaleza. Pienso que entre todos, podemos conseguir un mundo mejor y gracias a Tiendanimal, puedo contribuir a ello.