Los hurones viven o pasan gran parte del día en jaulas, al igual que muchas otras mascotas. Es importante para su salud y para el bienestar de todos en la casa que sigas una rutina de aseo de la jaula, sus accesorios y también del hurón.
Limpieza de la jaula, los accesorios y la bandeja higiénica
Todos los días deberás recargar los platillos de agua y comida y lavarlos antes de devolverlos a la jaula. Puedes usar el mismo producto que usas para lavar la vajilla, cuidando de aclararlos bien para que no queden restos de detergente. También necesitas limpiar a diario la bandeja sanitaria, incluso dos veces al día según la cantidad de hurones que la usen. Puedes retirar solo las porciones que estén sucias y dejar el resto. Cada tanto renueva todo el material absorbente y desinfecta bien la bandeja con algún producto que sea eficaz, no deje olor fuerte y no sea tóxico. La frecuencia del cambio completo depende de cuántos hurones tengas, pero no debería pasar de una semana.
Una vez a la semana quita todos los accesorios de la jaula (hamacas, tubos, colchón, telas o prendas) y lávalos bien. Sigue las instrucciones para cada objeto, pero en general todos pueden ir a la lavadora de ropa común. Un buen truco es rociarlos con algún desodorante mientras se están secando, así podrás combatir un poco el olor fuerte que los hurones suelen tener. Hay muchos felices propietarios de estas mascotas a quienes en realidad les agrada el olor tan característico o simplemente no les molesta. También hay que asear los juguetes, pero sobre todo controlar los que ya estén muy desgastados o mordidos y puedan tener partes que estén por desprenderse. Estos es mejor sacárselos y, si quieres, cambiarlos por otros más nuevos. Así evitarás el riesgo de una obstrucción intestinal al tragar piezas pequeñas, cosa tan frecuente en los hurones. Revisa las uñas de tu mascota, pues algunos hurones necesitan que se les recorten cada 2, 3 o 4 semanas. Fíjate si la bandeja sanitaria ya necesita una renovación completa del material absorbente y desinfección. Es importante mantenerla limpia, pues es una de las mayores fuentes de bacterias, que pueden acabar enfermando a tu mascota.
Una vez al mes quita todo lo que esté dentro de la jaula para lavarla completamente con agua y un jabón neutro. Si es pequeña y tienes un patio, lo mejor es sacarla y cepillarla afuera.
El baño, el cepillado y las uñas
El otro aspecto de la higiene de estas mascotas es el cepillado y baño del animal. En la época de muda se hace muy necesario un cepillado diario para sacar todos los pelos que se han desprendido. Cualquier cepillo para hurones o gatos puede servir. Si no lo haces, puede formarse una bola de pelos en el tracto digestivo debido a la cantidad de pelos que el hurón traga cuando se acicala. Para evitar esto también se recomienda darle durante esta época un gel laxante que ayuda a que los pelos circulen sin acumularse.
Muchos hurones necesitan un recorte de sus uñas periódicamente. Puedes hacerlo tú mismo usando un cortauñas común o uno especial para hurones. Solo debes fijarte de no lastimar la vena central que se encuentra dentro de cada uña y se ve como una sombra rosada. Si lo haces sangrará y le dolerá. Si no sabes como hacerlo, pide al veterinario que te enseñe la primera vez.
No es aconsejable bañar a un hurón más de una vez al mes, y lo ideal es cada 2 o 3 meses. El baño no funciona para eliminar el olor a almizcle, e incluso puede incentivarlo durante unos días. Si tu objetivo es disminuir el olor, lo mejor es realizar un aseo concienzudo de los accesorios y la jaula como dijimos anteriormente. Cuando decidas bañar a tu mascota escoge un champú especial para hurones, pero si no consigues puedes usar uno para gatitos o para bebés. Debes tratar por todos los medios que la experiencia sea agradable, sobre todo al principio. Para esto puedes llevar juguetes a la bañera o darle alguna golosina, pero fundamentalmente presta atención para que el hurón no se asuste. Sostenlo con firmeza para que no sienta que puede hundirse, no te pongas nervioso y háblale con calma. También es bueno colocar una alfombra de goma bajo el agua para que pueda aferrarse mejor. Coloca champú en todo el cuerpo, pero evita la cara para no irritar sus ojos; cuando termines, enjuágalo con abundante agua y fíjate que no queden restos de jabón en el cuerpo y el pelo. Luego sécalo con una toalla o, si lo tolera, con un secador de aire caliente.
Ayudante Técnico Veterinario especializada en etología canina. Tiendanimal me ha permitido durante años trabajar en lo que más me apasiona: el mundo animal. Compagino mi trabajo colaborando como voluntaria en protectoras, santuarios, reservas y cualquier evento o actividad relacionada. He realizado diversos seminarios y cursos relacionados con la educación canina, las aves, la primatología y un largo etcétera. Disfruto aprendiendo cada día de estos increíbles compañeros con los que tenemos la suerte de convivir.