Su aspecto imponente le convierte en una de las razas preferidas de los amantes de los perros de gran tamaño. Es paciente, audaz, leal, cariñoso y obediente con su familia y tímido y reservado con los extraños. ¿Cómo educar a un perro grande como el tosa inu?
Es una raza tipificada bajo el término de Perro Potencialmente Peligroso (PPP), por lo que para adoptar un amigo de esta raza deberás cumplir una serie de requisitos, además de ser mayor de edad y no contar con antecedentes penales, se debe disponer de una probada capacidad física y psicológica.
Educar a un perro grande
Antes de nada, debes informarte para conocer la raza en profundidad. También, has de tener presente que es un ejemplar con una gran fuerza física por lo que necesita una persona capaz de manejarle. Si eres novato en la convivencia canina o no tienes espacio, quizá debas plantearte un amigo de menor envergadura.
Si tienes claro que tu compañero perfecto es un tosa inu, deberás recurrir a un profesional que te ayude con su educación, que debe basarse en la socialización desde los primeros meses de vida. Educar a un perro grande puede parecer complicado, pero con ayuda de un profesional será muy sencillo.
Desde cachorros: impregnación y socialización
Los primeros dos meses y medio de vida son decisivos a la hora de definir su personalidad. Por eso, durante este tiempo el cachorro debe permanecer bajo el cuidado de su madre: ella le enseñará el lenguaje canino, así como a corregir la ansiedad y la mordida. Es lo que se conoce como la etapa de la impregnación.
Tras este periodo y hasta los cuatro meses de edad discurre la etapa de la socialización. En ella, debe tener contacto con el mayor número de animales y personas posible, más allá de los que componen su núcleo familiar, así que deberás presentarle a todo tipo de personas, animales y entornos. Cuanto más socialice, mayor será la garantía de que crezca como un perro equilibrado y sociable. Los especialistas coinciden en que, si no disfrutan plenamente de este periodo, al crecer pueden presentar problemas de comportamiento, generando miedos y reacciones reactivas.
Educar a un tosa inu
Un perro obediente suele ser equilibrado. Por eso es la obediencia básica es indispensable. Recurre a un profesional para que te ayude desde una edad temprana con las órdenes básicas: Enseñarle a sentarse, acostarse, quedarse quieto, caminar al lado y acudir a una llamada. Es fundamental para educar a un perro grande.
La base para la educación de tu amigo peludo se asienta sobre un gran pilar: el refuerzo positivo, puesto que la sensibilidad del tosa inu hace que reaccione de forma muy negativa al castigo.
Juguetes para disfrutar… y educar
A los perros les gusta jugar por lo que aprovechar la ayuda de juguetes para su educación y adiestramiento es una solución muy práctica. Los juguetes favoritos de los canes son los que imitan sus conductas instintivas, especialmente el comportamiento cazador (buscar, acechar, perseguir, sujetar, sacudir).
Ese tipo de conductas se manifiestan, por ejemplo, cuando el perro va a buscar una pelota, juega al tira y afloja con una cuerda, o cuando alguien le persigue cuando entierra algo. Además de la pelota y las cuerdas, el frisbee, los dummies o los juguetes interactivos que se pueden rellenar con golosinas son buenas opciones.
Premios para todos los gustos
Lo habitual es utilizar trozos de comida para premiar las buenas acciones de tu amigo peludo. Se puede recurrir a salchichas, trozos o cortezas de queso curado, jamón cocido, mortadela en tacos, galletas o paté para perros o pienso de diferente sabor al que come normalmente.
También hay premios que no acaban el estómago pero llenarán de alegría a tu mascota. ¿Necesitas una idea? Vamos a darte dos: Su juguete favorito. Y las caricias. Con ellas y la ayuda de un profesional, la educación de tu Tosa Inu está garantizada.
