Es popular por ser considerado el segundo perro más veloz del planeta, por detrás del galgo inglés. Para quienes están pensando en adoptar un ejemplar de esta raza, se estarán planteando cómo cuidar a un galgo español y si se debe ponerle o no abrigo. ¿Tú también quieres saberlo? Hoy te damos respuesta. ¡Continúa leyendo!
Cuidar a un galgo español: ¡stop al frío!
De carácter dócil y tranquilo, si de algo disfruta el galgo español es de un ambiente relajado dentro de casa. También, de largos paseos o excursiones al campo.
Sin embargo, es una raza que sufre con las temperaturas extremas, sobre todo en invierno, porque no tiene una buena capa de subpelo. Por este motivo, los veterinarios aconsejan recurrir a dos complementos durante los paseos:
- Un collar ancho, que sea suave con la piel para evitar rozaduras.
- Un abrigo siempre que la temperatura exterior sea baja.
Ventajas del abrigo
Los expertos apelan al sentido común para usar esta prenda con nuestros amigos peludos. Solo es recomendable si el mal tiempo aprieta, aunque tiene muchas ventajas, puesto que es una barrera de protección:
- Frente al frío. Tanto los perros de pelo corto (como el galgo español), como los de pequeño tamaño, regulan peor le pérdida de calor por lo que pueden sufrir frío. Esta prenda les ayuda a mantener la temperatura.
- Frente a la lluvia. La lluvia puede aumentar la sensación de frío, por lo que un abrigo que le mantenga aislado de la humedad es un buen aliado en los días de paraguas.
- Frente a rasguños o eventuales mordiscos. Les proporciona una capa más que les resguarda del mordisco de otro perro o rasguños de ramas.
- Frente a parásitos. Aunque son más frecuentes durante el invierno, la presencia de algunos puede alargarse incluso en verano, ofreciendo una salvaguarda en zonas de humedades o bosques, donde puede haber más parásitos, como las garrapatas.
Cómo usar bien el abrigo en tu galgo
Igual de importante es usar bien esta prenda, como prestar especial atención al elegirla para comprarla. Ten en cuenta que está indicada para preservar a tu compañero del frío por lo que en ningún caso debes usarla si las temperaturas no son bajas, vais a hacer ejercicio intenso o durante demasiado tiempo porque puede producir:
- Mucho calor. La temperatura corporal de los cánidos es dos grados superior que la nuestra: 38ºC. Tenlo en cuenta siempre que realicéis ejercicio intenso, el paseo se prolongue en el tiempo y/o no haya agua cerca para evitar que tu amigo pueda pasarlo mal.
- Roces y llagas. A la hora de comprarlo, asegúrate de elegir la talla adecuada a su tamaño: debe quedarle pegado al cuerpo, pero sin apretar. Un abrigo mal puesto o demasiado apretado puede producirle heridas.
- Incomodidad. Si el abrigo no es el adecuado para el cuerpo de tu mascota, puede limitarle de forma que no pueda moverse con libertad.
- Alergias o dermatitis. Algunos tejidos pueden generar reacciones alérgicas en la piel de tu galgo. Para evitarlo, procura que no lleve el abrigo durante varias horas seguidas.
- Estrés. ¿Sabes cómo ataca un perro dominante a otro? Es muy parecida a la sensación de un abrigo apretado en el cuello y lomo en un perro. Tenlo en cuenta y, si le provoca una sensación de estrés y miedo procura no usarlo porque puede convertirse en agresividad.
Recuerda, además, lavar sus prendas con frecuencia para mantener la higiene y salud de tu mascota.
Además del abrigo, en caso de lluvia, para cuidar a un galgo español puede ser recomendable un impermeable que impida que el frío húmedo le cale el pelo y llegue a la piel. Y ya en casa, lo que agradecerá es una mantita en su cama para acurrucarse a gusto. ¡Y que el frío no te pille desprevenido!
