La primer pregunta que se hace una persona recién aficionada a los peces se relaciona con el número de peces que puede mantener en el espacio de su acuario. Seguramente habrán leído o les habrán indicado en su tienda de confianza algunos términos básicos acerca de la capacidad del depósito. Pero, en ocasiones, estos argumentos no son del todo suficientes para tomar una decisión; por eso, hablaremos en este artículo un poco más acerca de este tema con el fin de dejar más claras las decisiones que hemos de tomar con respecto a nuestros futuros peces y acuario.
Existen varios métodos en la acuariofilia para determinar el espacio ideal para nuestros peces de acuario. Generalmente, el cálculo que se utiliza es un litro de agua por cada centímetro de pez, aunque, por el bienestar de nuestros peces y mejor equilibrio de los acuarios, aquí recomendamos más de dos litros de agua por cada centímetro de pez, esta sí sería una buena regla a tomar en cuenta con la mayoría de peces tropicales y generalmente pequeños (como los tetras, bettas, platies o algunos peces arcoiris).
Sin embargo, el cálculo de ese volúmen no es suficiente para especies más grandes (como los oscar, siluros, plecostomus o barbos), o especies que ensucian más rápido (como las pirañas, kois o algunos cíclidos africanos), peces marinos (como las damiselas, peces mariposa y peces payaso), y peces de agua fría (como el goldfish o peces de la familia Lepisosteidae).Todos ellos necesitan más volumen de agua, por lo que lo ideal para ellos son más de 10 litros por centímetro de pez. Otro método para calcular el volumen es a través del peso: cuatro litros de agua por cada gramo de pez. También podemos hacerlo de acuerdo a la longitud del área del acuario, es decir, un centímetro de pez por cada quince centímetros de área. De todos modos, estos métodos se aplican de acuerdo a la especie que queramos mantener, ya que, por ejemplo, algunas especies son más dominantes y territoriales que otras, con lo que hay que tenerlo en cuenta al hacer nuestros cálculos.
En nuestro siguiente artículo usaremos una pequeña tabla a modo de guía para mostraros los métodos a utilizar según algunas determinadas especies.