¿Cómo preparo mi estanque para el invierno?

Los peces en el invierno entran en una especie de letargo. Es necesario comenzar a cambiar su dieta en el otoño por una con un aporte bajo de proteínas (generalmente a base de germen de trigo) y disminuir su ración diaria. Por debajo de los 7ºC ellos naturalmente dejan de comer. Recuerda no sobrealimentarlos, pues lo que único que harás es agregar deshechos orgánicos al agua.

Durante los meses fríos los peces se quedan en la parte más profunda del estanque; ellos no corren riesgo de congelarse si la profundidad es de 60 cm o más. Si donde vives se forma una capa gruesa de hielo o no hay suficiente profundidad te conviene mudar los peces a un tanque grande en algún lugar fresco de la casa.

En los estanques con peces conviene apagar la bomba de circulación de agua para no mezclar las capas superficiales frías con las profundas más templadas. Otra opción es dejarla funcionando con el pico apuntando en dirección horizontal cerca de la superficie. Si tienes una cascada, apágala o disminuye el flujo al mínimo. En esta época también baja la actividad de las bacterias del filtro, por lo tanto puedes apagar los equipos y el filtrado no se verá muy afectado. Cuando falta movimiento en la superficie puede ser necesario agregar un aireador para mantener una correcta concentración de oxígeno para los peces, sapos y ranas. Esta es una buena solución cuando se forma una capa de hielo que evita el intercambio de oxígeno con el aire. Puedes aprovechar esta época para hacer el mantenimiento de los motores. Lee bien las instrucciones porque algunos equipos deben ser puestos a punto y guardados si no van a usarse por un tiempo prolongado. Retira el filtro UV ya que no hace falta durante el invierno y puede dañarse. Si no hay peces en el agua puedes dejar todo encendido, pero cuida que no se congelen las tuberías.

También se recomienda cubrir la superficie del estanque con una red. Esto evita que caigan hojas y basura en el agua, pero también protege a los peces adormecidos de las garras de gatos, aves y otras especies silvestres.

El otoño es una buena época para limpiar el estanque. Para ello hay que hacer una cambio parcial de agua, retirando los detritus orgánicos que se hayan formado en el fondo, es una especie de barro, producto de la degradación de hojas, materia fecal, restos de alimento, etc. y una fuente de compuestos nitrogenados tóxicos para los peces que es conveniente eliminar. Retira también todas las hojas, ramas o césped que se encuentren en el agua.

Las plantas también deben protegerse durante el invierno. Los lirios resistentes que estén en tientos se podan y se trasladan a la parte más profunda del estanque donde la temperatura no es tan fría. Los papiros, malangas, totoras y otras plantas marginales deben podarse antes de las heladas para evitar que las hojas y material muerto caigan en el agua. Las especies tropicales no suelen sobrevivir los inviernos muy fríos; puedes intentar guardar los rizomas en un sustrato de turba en un sitio fresco pero a salvo del hielo. Las plantas económicas como lechugas, cabomba, jacintos, elodea, etc deben retirarse para que no pudran el agua.

El receso invernal es parte importante del ciclo de plantas y peces en el estanque. Aunque no resulta tan atractivo en estos meses, una buena preparación y cuidado dará sus frutos cuando vuelva el calor en la primavera.

Miriam Zazo

Ayudante Técnico Veterinario especializada en etología canina. Tiendanimal me ha permitido durante años trabajar en lo que más me apasiona: el mundo animal. Compagino mi trabajo colaborando como voluntaria en protectoras, santuarios, reservas y cualquier evento o actividad relacionada. He realizado diversos seminarios y cursos relacionados con la educación canina, las aves, la primatología y un largo etcétera. Disfruto aprendiendo cada día de estos increíbles compañeros con los que tenemos la suerte de convivir.