De vez en cuando puede ser necesario darle un baño a tu querido hurón, pues aunque él se acicale, siempre se puede acumular suciedad, restos de comida, algo de olor, etc. Recuerda que no debes bañarlo más seguido que una vez al mes, porque corres el riesgo de resecar demasiado su piel y hacer que segregue más grasitud y tenga cada vez más olor.
Ten en cuenta que es muy importante lograr que él se sienta cómodo y seguro. Muchos hurones son capaces de arañar y morder si intentan escapar de la bañera. El agua debe estar caliente para evitar que tu mascota se enfríe y para que el baño le resulte agradable, pues su temperatura corporal es más alta que la nuestra (entre 38,5 y 39,5ºC). Sostén su cuerpo todo el tiempo para darle seguridad y que no vaya a resbalarse en algún movimiento brusco; es mejor que el agua no sea profunda, así puede apoyar sus pies todo el tiempo.
Prepara todos los implementos que vas a necesitar antes de comenzar el baño. Una vez que hayas metido al animalito en el agua ya no podrás alejarte porque se podría escapar y caer. Los elementos básicos son:
–champú: en lo posible que sea especial para hurones. Los de gatos, perros y humanos pueden alterar el balance de la piel y causar irritación.
–acondicionador: las cremas acondicionadoras son un elemento extra que te permiten darle un toque especial al pelaje de tu mascota, dejando un agradable perfume y un brillo superior. Además dejan la piel humectada.
-toalla: puedes usar una toalla común, una de microfibra super absorbente o un saco de secado, que es una toalla cerrada donde metes al hurón para que se seque.
Para empezar moja por completo a tu mascota y aplica el champú en tu mano. Frota todo su cuerpo, prestando especial atención a la cola, abdomen y zona perianal, que es donde suele tener feo olor. Fíjate de llegar hasta la piel para limpiarla bien. Es mejor no aplicar champú en la cara para evitar irritar sus ojos, boca u oídos. Cuando hayas acabado, aclara con abundante agua caliente para que no quede ningún resto de champú sobre el cuerpo, pues podría causar comezón más tarde. Aprovecha el momento para revisar bien la piel y descubrir bultos, heridas, pulgas o cualquier lesión que pudiera necesitar atención médica. Luego aplica el acondicionador y acláralo o no según las instrucciones del producto.
Cuando lo saques de la bañera prepárate para verlo enloquecer. Es normal que se revuelquen y refrieguen en la alfombra, sobre una toalla o cualquier cosa donde crean que pueden sacarse todo lo que les has puesto. Te conviene que esté en una habitación cerrada para que no haya riesgo de escape.
Una vez que se haya calmado, asegúrate de darle unos cuanto mimos y alguna golosina para recompensarle por haber tolerado semejante procedimiento sin quejas.
Dra. Isabel Iglesias
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Ayudante Técnico Veterinario especializada en etología canina. Tiendanimal me ha permitido durante años trabajar en lo que más me apasiona: el mundo animal. Compagino mi trabajo colaborando como voluntaria en protectoras, santuarios, reservas y cualquier evento o actividad relacionada. He realizado diversos seminarios y cursos relacionados con la educación canina, las aves, la primatología y un largo etcétera. Disfruto aprendiendo cada día de estos increíbles compañeros con los que tenemos la suerte de convivir.