Mantener la salud de nuestros felinos implica proporcionarles una dieta que se ajuste perfectamente a sus necesidades específicas. Sin embargo, hay momentos en la vida de un gato en los que es necesario ajustar su dieta.
La transición de un tipo de pienso a otro debe hacerse con cuidado y de manera gradual para evitar que el gato experimente algún trastorno, como vómitos o diarreas. A continuación, te contamos los motivos por los cuales podría ser necesario cambiar el alimento de tu gato y te damos los pasos para hacer el cambio del pienso de la mejor manera.
Razones para cambiar el alimento de tu gato
La salud de tu felino puede verse afectada si su comida no satisface sus necesidades nutricionales específicas, lo que subraya la importancia de realizar cambios dietéticos solo cuando sean necesarios y de la manera adecuada.
Aquí te damos algunas razones por las cuales podría ser necesario cambiar la alimentación de tu gato:
- Evolución en las necesidades nutricionales según la edad: A medida que los gatos crecen y envejecen, sus necesidades nutricionales cambian. Esto incluye el paso de un alimento formulado para gatitos a uno adecuado para adultos, y posteriormente, a uno específico para gatos mayores, que considera sus necesidades calóricas y nutricionales ajustadas para apoyar su salud en la vejez. Echa un ojo a nuestra guía de cuidados para gatos senior.
- Por necesidades de salud. Algunas condiciones de salud pueden requerir dietas especializadas. Por ejemplo, los gatos esterilizados podrían necesitar un pienso para gatos light formulado específicamente para ayudar a prevenir el aumento de peso y otras complicaciones. Del mismo modo, enfermedades como la diabetes pueden demandar una dieta adaptada que deberá ser supervisada por un veterinario.
- Introducción de variedad en la dieta: Puede surgir el deseo de enriquecer la dieta de tu gato incorporando tipos de alimento que no consume regularmente, como es el caso de añadir comida húmeda para gatos a una dieta basada en pienso seco. Esta práctica, conocida como alimentación mixta, puede ayudar a promover una hidratación adecuada y aportar variedad a su régimen alimenticio. Si deseas más información, conoce aquí todos los beneficios de la alimentación mixta.
¿Por qué hacer el cambio de alimento con cuidado?
Los gatos, por instinto, muestran un comportamiento conocido como neofobia alimentaria, es decir, una cautela o resistencia natural ante nuevos alimentos. Esta reacción instintiva sirve como un mecanismo de defensa para evitar la ingesta de alimentos potencialmente dañinos o contaminados.
Dado que sus sistemas digestivos pueden ser sensibles a cambios abruptos, introducir nuevos elementos en su dieta representa un riesgo de desencadenar trastornos gastrointestinales, como diarreas y vómitos.
Esta sensibilidad digestiva subraya la necesidad de implementar cambios en la alimentación de nuestro gato de manera gradual y cuidadosa.
Si notas que tu gato vomita después de un cambio en su dieta, o incluso sin motivo aparente, es importante entender las posibles causas detrás de esto. Para obtener más información te invitamos a leer nuestro post sobre las causas del vómito en gatos.
¿Cómo hacer el cambio de pienso en gatos?
Por regla general, se recomienda que la introducción del nuevo pienso para gatos se haga en un plazo medio de siete días. Así no sólo prevenimos que el gato rechace el nuevo alimento por la natural neofobia alimentaria a la que nos hemos referido, sino también reducimos el riesgo de que tenga algún trastorno gastrointestinal.
La mejor manera de proceder es ir aumentando paulatinamente la cantidad de pienso nuevo en cada ración, al tiempo que vamos reduciendo la cantidad del pienso que va a dejar de tomar.
Nosotros te recomendamos esta fórmula para cambiar el alimento de tu gato:
- Los dos primeros días: ¾ de alimento habitual + ¼ de alimento nuevo.
- Días 3 y 4: ½ de alimento habitual + ½ de alimento nuevo.
- Días 5 y 6: ¼ de alimento habitual + ¾ de alimento nuevo.
- Día 7: Toda la ración del alimento nuevo.
| Es importante mantener las rutinas de alimentación habituales de tu gato durante el proceso de transición. Alimenta a tu gato en los mismos horarios y lugares que antes para evitar añadir estrés a la adaptación al nuevo pienso. |
Por supuesto, si durante el proceso aparece diarrea o vómitos, hay que volver a su alimento habitual y consultar con el veterinario. Recuerda que la alimentación adaptada a las necesidades nutricionales de tu gato es el primer paso para su salud.
¿Cuándo cambiar el pienso de gatito a adulto?
El momento ideal para cambiar el pienso de un gatito a uno de adulto es alrededor de los 12 meses de edad, cuando han completado su crecimiento. Es importante hacer este cambio gradualmente para ajustar su sistema digestivo a la nueva dieta y evitar problemas gastrointestinales.
¿Qué hago si mi gato rechaza el pienso nuevo?
Si tu gato rechaza el pienso nuevo, es importante actuar con paciencia y comprensión, considerando que los gatos son animales de hábitos y pueden ser especialmente sensibles a los cambios en su alimentación. Aquí tienes algunos consejos que puedes intentar:
- Transición más gradual: Si el cambio al pienso nuevo fue relativamente rápido, intenta hacer la transición más lentamente. Puedes comenzar con una proporción aún menor del nuevo pienso mezclado con el habitual y aumentar la cantidad del nuevo muy gradualmente, a lo largo de varias semanas si es necesario.
- Mezcla los sabores: Intenta mezclar el pienso nuevo con algo que a tu gato le encante. Esto podría ser un poco de caldo de pollo sin sal, un poco de su alimento húmedo favorito, o incluso un poco de agua.
- Calienta el pienso: Puedes intentar calentar ligeramente el pienso nuevo para liberar más aroma y hacerlo más atractivo para tu gato.
- Establece horarios de comida fijos: Ofrecer comida a tu gato en horarios fijos y retirar cualquier alimento no consumido después de 30 minutos puede ayudar a tu gato a acostumbrarse al nuevo pienso, al crear un rutina y aumentar el apetito para la siguiente comida.
- Consulta con tu veterinario: Si tu gato sigue rechazando el nuevo pienso o muestra signos de problemas de salud como pérdida de peso, letargo o problemas digestivos, es importante consultar con tu veterinario.
En resumen, cambiar la comida de tu gato es algo que hay que pensar bien, pero si lo haces con cuidado, puede ser muy bueno para él. Es importante hacer el cambio poco a poco y estar atentos a lo que necesita comer tu amigo con bigotes a medida que crece o cambian sus necesidades. Así, este cambio puede ser realmente beneficioso para su salud a largo plazo.
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